Un positivo balance del Acuerdo de Unión Civil, contrato que reconoce al conviviente como carga en el sistema de salud, comparten la directora Zonal de Fonasa Centro Norte, Orielle Díaz y el director regional del Registro Civil, Omar Morales, a dos meses recién cumplidos de la Ley Nº 20.830.
Según cifras de cada institución, ya son más de trescientas sesenta las parejas de la región que han celebrado unión civil y de ellas, un 10% ha solicitado a Fonasala incorporación de uno/a de los/as convivientes como carga, para efectos de tener cobertura en salud. “Es un trámite bastante sencillo, similar al de cualquier persona que desea ingresar como beneficiario nuestro. Se debe presentar el certificado que extiende el Registro Civil y una declaración jurada simple, de que se vive a expensas del titular. Nos interesa que las personas regularicen su situación en materia de salud, porque muchas no tenían cobertura porque no existía este beneficio”, describió la directora Zonal de Fonasa, Orielle Díaz.
“El llamado es a ocupar esta herramienta que se ha generado producto de esta nueva ley, que evidentemente viene a mejorar las condiciones de vida de las familias que se han adscrito a esta nueva institucionalidad. Nosotros esperamos que vaya en aumento, proyectamos llegar a unas mil actuaciones anuales por Acuerdo de Unión Civil”, apuntó Omar Morales.
Consultado por el perfil de quienes han firmado hasta ahora este tipo de acuerdo, la autoridad señaló que en el 70% de los casos se trata de parejas heterosexuales y que sólo el 30% restante corresponde a convivientes del mismo sexo. “Nosotros esperamos que se vaya masificando, como una alternativa a la vida en común, que permita también cobertura de derechos”, añadió Morales.
Que ambos contasen con protección en salud, fue uno de los beneficios del Acuerdo de Unión Civil que llevó a Pamela Díaz Fuentes y a Oscar, su pareja por más de 25 años, a contraer la unión los primeros días de noviembre. “Me estaba saliendo muy caro atenderme de manera particular, entre la visita al médico, exámenes y tratamiento, dependiendo de la dolencia pueden ser más de cien mil pesos. Por lo tanto necesitábamos algo así, cuando supimos del beneficio creo que fuimos de los primeros en inscribirnos porque es un alivio inmenso. Tomamos la determinación rápido, no hubo ni que pensarlo” relata la porteña, ahora inscrita como carga de su conviviente civil en la base de beneficiarios Fonasa, lo que le permite acceder a atención en la red pública y privada en convenio.
“Sólo dos meses han pasado desde la entrada en vigencia de esta ley, que incorpora aún más equidad a nuestro sistema de salud público, que confiamos se seguirá fortaleciendo. A todas las parejas que opten por este camino, sean de igual o diferente sexo, les invitamos a que se informen acerca de los beneficios que Fonasa tiene para convivientes civiles”, sostuvo Orielle Díaz, quien para concluir informó que la solicitud de incorporación de carga se puede realizar incluso a través de www.fonasa.cl
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