Comenzo historico rescate de los 33 mineros de Copiapo

A las 00.10 de hoy, Florencio Ávalos, de 31 años y padre de dos hijos, se convirtió en el primero de los 33 mineros en ser rescatado desde el fondo de la mina San José. El trabajador salió sonriente desde la cápsula "Fénix II" y abrazó primero a su pequeño hijo, Byron, quien lloraba de emoción, y luego a su esposa Mónica y su otra hija. Luciendo un casco rojo y gafas oscuras, el minero fue recibido entre aplausos y luego se abrazó con el Presidente Sebastián Piñera, quien también lo esperaba en la superficie junto a Cecilia Morel.

Florencio Ávalos lucía en buenas condiciones, aunque de inmediato el equipo médico lo transportó en camilla hasta el hospital de campaña, montado en la explanada de la mina San José. Tras el rescate, Wilson Ávalos, tío del minero, expresó que "estamos felices con esta victoria, sabemos que esto está en buenas manos". También destacó que el Gobierno "ha hecho su trabajo con delicadeza y calma". En minutos previos, su padre, Alfonso Ávalos, había dicho que era un orgullo que su hijo fuera el primero en salir del fondo de la mina. Producto del gran asedio en el lugar, la carpa que estaba habilitada para que el minero compartiera unos momentos con su familia fue destruida, por lo que debieron trasladarse hasta otro lugar.

Previamente, a las 23.36 horas, había llegado al fondo de la mina el rescatista de Codelco Manuel González, quien fue recibido con aplausos por los 33 mineros.

Cerca de las 01.34 horas, Con una increíble energía y sentido del humor, el minero Mario Sepúlveda, el segundo en llegar a la superficie, definitivamente se robó la película en esta primera jornada de rescate.

El minero, quien hacía de "presentador" en los videos que enviaban los 33, comenzó a gritar "¡Sáquenme de aquí!" cuando aún iba ascendiendo por el ducto, provocando las risas de quienes lo esperaban arriba.

Una vez que salió de la cápsula -casi una hora después que Florencio Ávalos - preguntó, como si nada hubiera pasado, "¿Cómo estamos?" y luego dijo a todos los presentes: "Se pasaron mijitos". Después besó a su señora, Elvira, para quien pidió "una silla de ruedas", anticipando su reencuentro. Luego se agachó y comenzó a sacar de un bolso unas piedras que trajo a modo de recuerdo desde el fondo de la mina, las que repartió entre los rescatistas y autoridades, que de seguro estaban más nerviosos que él.

Al Presidente Sebastián Piñera lo abrazó efusivamente en varias ocasiones, mientras que al ministro de Minería, Laurence Golborne, lo saludó con un: "Puta, jefazo". Pero la "performance" de Mario Sepúlveda no terminó ahí. Luego corrió hasta el público, que estaba detrás de una reja, y les gritó "¡Gracias chiquillos!", para finalizar con un "Ceacheí", que fue coreado hasta por el Presidente. Después de eso, de todas formas debió ser llevado en camilla hasta el hospital de campaña para constatar si se encontraba en buen estado de salud.

Despues fueron rescatados el boliviano Carlos Mamani, el joven Jimmy Sanchez, Osman Araya, José Ojeda, Claudio Yáñez y el lonjevo Mario Gómez, hasta el cierre de la edición se comenzaba el rescate de Alex Vera, el décimo minero rescatado.