Así lo
anunció oficialmente la Municipalidad porteña junto a Carabineros y la empresa
que ejecuta esa gran obra en que se invierten 202 millones de pesos aportados
por el FNDR, Fondo Nacional de Desarrollo Regional de la Quinta Región.
Se detalló
que lo medular será cerrar el final de la Avenida Centenario , a pocos metros
del puente, con paneles que aislen el espacio para las faenas de completar el
relleno sobre los dos túneles en forma de cajón confeccionado para encauzar las
aguas del estero Arévalo, demoler lo que quede de la estructura del puente y
confeccionar 3 pistas de circulación vehicular y dos veredas para el paso
peatonal en ese punto que es la salida de la ciudad de San Antonio hacia
Santiago por la Autopista del Sol y/o Ruta 78.
El cierre no
afectará al comercio y vecindad de ese tramo de la principal arteria urbana
local pero obligará a desvíos laterales. Los vehículos que se dirijan a
Santiago y al sector Población Bellavista deberán virar en la esquina de
avenida Centenario con calle Lauro Barros hacia el norte y empalmar hacia el
oriente por la calle José Manuel Balmaceda que es entrada a la ciudad pero
ahora tendrá doble sentido demarcado en el centro de sus dos calzadas más gran
cantidad de letreros de advertencia y guía.
En el punto
desvío hacia las numerosas poblaciones del sector Bellavista se pondrá un Disco
Pare a quienes provengan de la Ruta 78, dándole preferencia al giro de los
vehículos que vayan hacia ellas.
En la bajada
de acceso a la ciudad, muchos metros antes del punto conflictivo y
transformación de calle Balmaceda se pondrá también gran cantidad d
señalización para evitar accidentes.
Una medida
lateral importante es para los Buses Interprovinciales que estarán impedidos de
transitar por esa área, ya sea en salida o llegada a la ciudad. Ahora deberán
salir exclusivamente desde el Terminal de Buses Barrancas hacia Avenida Barros
Luco y virar en el Paradero 8 a la Calle Curicó para empalmar por la Rotonda al
Camino de Nuevo Acceso al Puerto y de allí a Santiago, Valparaíso, Melipilla u
otras ciudades externas.
Eso
significará que los habitantes de San Antonio y Llolleo ya no tendrán
salida ni llegada de buses provinciales en sus ciudades, debiendo ir y llegar
al Terminal Barrancas. Sólo los buses que vayan a Valparaíso por la Ruta
Costera podrán virar al norte para cumplir su recorrido habitual.
Todo eso,
según precisaron los personeros de la Municipalidad, de la Empresa Constructora
“Pavimentos Chilenos” que hace la obra y Carabineros, durará 50 días y con
especial apoyo policial se tratará de evitar accidentes pero también los
conductores de todo tipo de vehículos deberán cooperar en esa emergencia vial
que permitirá después un evidente progreso con una más amplia y segura boca de
salida de la ciudad capital comunal y provincial hacia el resto del país.
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